Retorno

Y me encuentro aqui nuevamente en este pequeño oasis de silencio, enclavado en el centro de esta gran urbe, oculto por moles de concreto.

Tu tranquilidad acoge mi alma, las copas de los arboles me cobijan con su sombra. Entre cantos de pajaros y junto al murmullo del silencio, mas de una vez escuchaste mis anhelos.

Tambien fuiste testigo del nacimiento del amor en mi, recostado en tus suaves sabanas de cesped. Fuiste espectador de las tiernas caricias, y con el correr de los dias de verano, la llama del amor avivo mas las emociones, desinhibiendo los sentidos.

Siempre me observas en silencio, comprensivo, complice.

He vuelto por aqui. Esta vez lo hago como siempre, solitario. Tus fieles guardianes me reciben con su calido silencio.

Ya ha pasado mas de un año desde la ultima vez que te visite, mientras escribo estas palabras, los recuerdos se hacen presente en mi mente, mas estos traen consigo un sabor a melancolia. Como evitarlo, si bajo tus sombras se grabo a fuego un dia el amor que hoy trato de olvidar y enterrar en el pasado entre tus hojas secas.

Hoy he retornado a ti nuevamente en busca de consuelo. Habia olvidado el brillo de tus hojas, el canto de los duendecillos emplumados, las caricias del viento.

Gracias viejo amigo, como siempre, tu tranquilidad me reconforta. Es hora de reiniciar la marcha. El circulo termina por cerrarse.

Adios San Borja, probablemente nos volvamos a ver nuevamente. En alguna otra oportunidad regresare en solitario, o tal vez seas un mudo testigo del nacimiento de un nuevo amor, ya que este corazon sigue siempre dispuesto a amar nuevamente.